El primer paso para constituir un patrimonio financiero.

¿Has hecho alguna vez el ejercicio de registrar cada uno de los gastos en los que incurres en tu día a día, por pequeño que sea, durante un tiempo prudencial, para analizar tus hábitos de consumo?

Una de las conversaciones más complejas a las que me enfrento a la hora de planificar la inversiones de un cliente es la de su presupuesto personal y familiar, fundamental a la hora de conocer ingresos, hábitos de gasto y finalmente, la capacidad de ahorro que dará lugar, con el tiempo, a un patrimonio financiero.

Está estimado que, salvo en casos muy excepcionales (familias con todos sus miembros en paro), deberíamos poder ahorrar al menos un 10% de nuestros ingresos mes a mes. Son estas pequeñas cantidades las que nos permitirán enfrentar imprevistos y comenzar a crear un fondo de emergencia. Se calcula que este fondo de emergencia debería estar constituido por entre seis y doce meses del gasto mensual de tu unidad convivencial.

¿Y tú, sabías esto? ¿Has calculado alguna vez un presupuesto familiar?